Crosswalk.com

El Camino Bíblico - 4 de Febrero

 

Leviticus 1

En la lectura de hoy:

El holocausto; la oblación a Jehová; el sacrificio de comunión

El primer sacrificio mencionado en los tres primeros capítulos de Levítico se llama «ofrenda encendida de olor grato para Jehová», que significa que la ofrenda era voluntaria y agradable a Dios. «Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando alguno de entre vosotros ofrece ofrenda a Jehová, de ganado vacuno u ovejuno haréis vuestra ofrenda. Si su ofrenda fuere holocausto vacuno, macho sin defecto lo ofrecerá; de su voluntad lo ofrecerá a la puerta del tabernáculo de reunión delante de Jehová. Y pondrá su mano sobre la cabeza del holocausto, y será aceptado para expiación suya . . . » (Levítico 1:2-4,9).

La primera ofrenda mencionada se llamaba «el holocausto». Ello simbolizaba que el oferente daba su propia vida en completa sumisión a Dios y sin motivos egoístas. La ofrenda tenía que ser un becerro, una oveja, una cabra, unas tórtolas, o unos palominos, según la situación financiera del oferente (1:3,10,14). Si el oferente tenía ganado vacuno, entonces ofrecía un toro. Si, sin embargo, el oferente tenía rebaños de ovejas, entonces su ofrenda sería una cordero o una cabra; pero sería una ofensa a Dios si estos dos oferentes ofrecieran solamente un palomino. Pero, si el oferente era tan pobre que no tenía rebaño o ganado, entonces una ofrenda aceptable podía ser unas tórtolas o unos palominos. Esta fue la ofrenda hecha por José y María, la madre de Jesús, lo cual nos muestra lo pobre que ellos eran antes que los magos llegaran con sus costosos regalos (Lucas 2:22-24; Mateo 2:11; ver Levítico 12:2-8).

El proceso para la ofrenda era que el oferente tenía que poner sus manos fuertemente sobre la cabeza del animal, que simbolizaba la transferencia del pecado del culpable sobre el animal inocente para expiar por sus pecados. El pecador . . . «Entonces degollará el becerro en la presencia de Jehová; y los sacerdotes hijos de Aarón ofrecerán la sangre, y la rociarán alrededor sobre el altar» (1:5). La sangre ofrecida a Dios indicaba que una vida había sido presentada como sustituto por la persona que había pecado. Esto fue una sombra de la crucifixión « . . . la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo, quien se dio a Sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para Sí un pueblo propio, celoso de buenas obras» (Tito 2:13-14).

Pensamiento para hoy:

Es el espíritu con que damos lo que más cuenta.

Lectura opcional: Marcos 4

Nota: El Camino Biblico cubre el Antiguo Testamento con y un comentario en un periodo de nueve meses, de Enero hasta Septiembre. Cada día durante este mes hay una opcion de leer un capítulo del Nuevo Testamento. Pues, el lector puede ir através del Nuevo Testamento dos veces usando el plan del Camino Biblico.

Versículo de la semana para aprender de memoria: Juan 3:18