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Con Diseño Divino - La Semana del 1 de Enero

Con Diseño Divino

Los planes de Dios para tu vida (primera parte)

De la Palabra de Dios:Pues yo sé los planes que tengo para ustedes —dice el SEÑOR—. Son planes para lo bueno y no para lo malo, para darles un futuro y una esperanza” (Jeremías 29:11, NTV).

Planes. Todos los hacemos. Algunos con más detalles, otros con menos. Algunos apurados, otros con mucho tiempo. A veces de manera consciente y otras, pues casi sin pensarlo. Pero siempre tenemos planes. Lo que sucede es que muchas veces no salen como pensamos. En algunas ocasiones nos equivocamos en lo que planeamos. En otras podemos decir sencillamente que fueron malos planes.

Comienza un nuevo año y es casi seguro que hablemos de planes y metas. Pero no hablemos hoy de mis planes, ni de los tuyos. Hablemos de los planes de Dios.  Así es, Dios tiene planes para tu vida y para la mía. Y, honestamente, eso me resulta grandioso.

El pasaje del principio fue una profecía de Dios para los desterrados de Israel que estaban en Babilonia.  Cuando uno está desterrado está sin patria, sin raíces, sin lo conocido, sin lo familiar, y sin futuro. ¿Alguna vez te has sentido así?  ¿Estás entrando al nuevo año de esa manera, como si estuvieras en una Babilonia, como si caminaras por un túnel sin poder ver la luz, ni siquiera al final? Aun así, Dios tiene planes para tu vida. Y quiero que te enfoques en lo que esta Palabra nos va a enseñar.

Dios sabe los planes que tiene para tu vida. (v. 11a) Yo sé los planes…Muchas veces el mundo que nos rodea nos lleva a dudar si Dios realmente sabe lo que está haciendo, o si siquiera está haciendo algo en nuestra vida porque todo parece estar atascado… ¡como que no vamos a salir nunca de Babilonia! Sin embargo, mira lo que dice el Salmo 139:16: “Me viste antes de que naciera. Cada día de mi vida estaba registrado en tu libro. Cada momento fue diseñado antes de que un solo día pasara”. Dios sabe los planes desde el principio, con detalles. Él no tiene problemas de memoria, ni de estrés, ni tampoco cambia de opinión (Números 23:19). 

El rey David entendió muy bien que Dios tenía planes para su vida y en uno de sus salmos escribió: “El Señor llevará a cabo los planes que tiene para mi vida, pues tu fiel amor, oh Señor, permanece para siempre” (Salmos 138:8). Él vivía con esa certeza y lo mismo debemos hacer nosotros. Dios sí sabe los planes que tiene para tu vida y para mi vida, él no anda improvisando.

Los planes de Dios son para bien. (v. 11b) Por alguna razón a veces pensamos que Dios es una especie de aguafiestas cósmico y que los planes que tiene para nuestra vida son de sufrimiento, de calamidad, etc. Pero Dios no miente, y su palabra dice que los planes que tiene para nosotros son para bien. Ahora fíjate, no dice que esos planes sean fáciles, ni tampoco que carecerán de contratiempos o dificultades. El versículo habla de la meta de esos planes: planes que son para bien, para darnos futuro y esperanza. Cuando a nuestra mente viene la idea de que no podemos confiar plenamente en Dios porque si nos entregamos a él sin reservas nos va a “amargar la existencia”, te puedo asegurar dos cosas: o no conoces realmente al Dios en que crees, o está creyéndole al enemigo. Jesús dijo que el ladrón (refiriéndose al diablo) viene para robar, matar y destruir, pero él vino para darnos una vida plena y abundante. Nosotros tenemos que confiar en que los planes que Dios tiene para nosotros tienen ese objetivo, nuestro bien.

Tal vez la situación que estás atravesando no la puedes entender, no vez la luz al final del túnel, aún en ese caso tienes que confiar en que los planes de Dios son para bien.

Pero el plan que Dios tiene con cada vida es diferente. Si tratas de comparar el plan de Dios para tu vida con el plan de Dios para la vida de otra persona, te vas a frustrar. Cada persona es única, y el plan de Dios es único para cada persona. Lo único que es común en ese aspecto es que todos los planes de Dios son para el bien de aquellos que le aman y que han sido llamados de acuerdo a su propósito.

¿Quieres experimentar la vida plena y abundante? Tienes que decirle a Dios: “Acepto tu plan, sea cual sea, porque tú me amas y sé que tu plan para mi vida es para bien”.

¡Te deseo muchas bendiciones mientras vives la vida plena y abundante que Dios planeó para ti!

Wendy

El próximo lunes, la segunda parte de este tema. Si quieres aprender más sobre el diseño divino para tu vida, te invito a visitar www.wendybello.com

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