Crosswalk.com

Encuentro con Jesús - 19 de Julio, 2010

Julio 19, 2010

2 Corintios 1.12 

La conciencia considera los pensamientos y las acciones para determinar si están en consonancia con nuestras normas y principios. Como cristianos, es importante conservar en buen estado nuestra conciencia para ser merecedores de confianza, y para ello debemos:

  • Aceptar la Biblia como nuestra norma de conducta. Segunda a timoteo 3.16 dice. "Toda la escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia". Si elegimos adoptar los valores de nuestra cultura, que a menudo no coinciden con los del Señor, nuestra conciencia será poco confiable. Lo que necesitamos es estar alertas a la posibilidad de desviarnos del rumbo.
  • Alinear nuestra mente con la del señor. Romanos 12.2 dice que renovemos nuestra mente. Es necesario combatir siempre lo que este mundo incrédulo acepta como verdadero y justo. Debemos estar en condición de identificar las ideas pecaminosas.
  • Aplicar la Palabra de Dios a la vida diaria. Cuando nuestros hábitos reflejan valores santos, nuestra conciencia se vuelve más sensible a lo que es correcto e incorrecto.
Además, es esencial confiar en el Espíritu Santo para entender bien las cosas. Nuestra conciencia por sí misma es de mucho valor, pero se vuelve imprescindible cuando está acompañada de la guía del espíritu Santo (Jn 16.13).

La Biblia nos enseña cómo vivir —en cuanto a pensamientos, conducta y emociones (Gá 5.16-23). A medida que nuestras normas se alineen más estrechamente con las del Señor, nuestra conciencia será cada vez más confiable porque estará basada en lo que es importante para nuestro Padre celestial. La Biblia nos enseña cómo vivir —en cuanto a pensamientos, conducta y emociones.

www.encontacto.org  - www.encontacto.org/meditaciondiaria  -  www.encontacto.org/archivodevocional