Crosswalk.com

El Camino Bíblico - 21 de Septiembre


Joel 1

En la lectura de hoy:

La plaga de los insectos; el llamamiento de Joel al arrepentimiento; el día de Jehová; el Espíritu Santo; la restauración de Israel; el juicio de las naciones

Joel da avisos de la inminente destrucción de Jerusalén. En Su misericordia, «Palabra de Jehová que vino a Joel, hijo de Petuel. . . . Tocad trompeta en Sion, y dad alarma en Mi santo monte . . . » (Joel 1:1; 2:1). La trompeta fue usada a menudo con propósitos religiosos para llamar a la congregación a unirse, para anunciar las fiestas solemnes y los días de fiesta, y por el atalaya para avisar de algún peligro venidero (Números 10:1-10). En este caso, la trompeta fue usada para avisarles de un gran ejército enemigo que venía. Pero, aun los pecados de los enemigos, que estaban entre ellos en Israel, eran muchos más serios que el enemigo que se acercaba. «(Porque) viene el día de Jehová, porque está cercano. Día de tinieblas y de oscuridad . . . ni tampoco habrá quien de él escape. . . . Por eso pues, ahora, dice Jehová, convertíos a Mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento.» (Joel 2:1-12).

La única condición indispensable para recibir el perdón y ser aceptado por el Señor es el arrepentimiento genuino. El verdadero arrepentimiento es triplo: Primeramente, es un dolor por los pecados que hemos cometido contra Dios, y también contra otras personas; en segundo lugar tenemos que venir al Señor, pidiéndole Su perdón por todos nuestros pecados; y en tercer lugar, tenemos que abandonar el pecado para llegar a vivir vidas que agradan a nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

El apóstol Pedro predicó sobre el significado profético de las palabras de Joel, diciendo: «Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo» (Hechos 2:21). Después, él (Pedro) concluyó su mensaje al decir: « . . . Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos» (Hechos 2:38-39). Todos nosotros estamos entre esos que «están lejos»; y la invitación y la promesa que publicó Pedro todavía se les ofrecen hoy a todos.

El profeta Joel también predijo sobre el final «día de Jehová» que aún está por venir: «¡Ay del día! porque cercano está el día de Jehová, y vendrá como destrucción por el Todopoderoso» (Joel 1:15). Esto traerá a fin el gobierno miserable de la humanidad pecaminosa y finalmente le dará las bienvenidas al reino de Jesucristo, el Justo Rey de Paz.

Jesucristo habló sobre ese tiempo triunfal: «y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran Gloria» (Mateo 24:30).

Pensamiento para hoy:

El Espíritu Santo trabaja en nuestras vidas al mismo nivel que nos rendimos a Su voluntad tal y como está revelada en Su Palabra.

Versículo de la semana para aprender de memoria: Santiago 1:5