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Alimento Diario - 3 de Marzo

  

El Jesús verdadero

Sepan, pues, todos ustedes... que este hombre está aquí delante de ustedes sano gracias al nombre de Jesucristo de Nazaret, crucificado por ustedes pero resucitado por Dios... en ningún otro hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos. Hechos 4:10-12

En ningún otro hay salvación.

Para el mundo, esta afirmación no solamente es tonta y falsa, sino totalmente incorrecta. Por lo menos esa es la opinión expresada en un artículo publicado por una agencia de noticias. Si bien en él se admite que Jesús realmente vivió, también se pone en duda la historia del Salvador como se encuentra narrada en la Biblia.

La parte más cuestionada de la vida de Jesús, y seguramente esto no es una sorpresa para ninguno de nosotros, es su resurrección de la muerte. Sin dar ninguna razón o prueba, el artículo dice: "... lo que realmente importa de las historias menos ‘convincentes' de la Biblia -como la resurrección- no es si en verdad sucedieron, sino lo que significan para los seguidores de Jesús".

Pedro y el resto de los apóstoles presentes en el día de Pentecostés (de donde viene el texto bíblico para esta reflexión), no habrían estado de acuerdo con esto. Por algo dijeron: "... en ningún otro hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos." 

San Pablo tampoco habría estado de acuerdo. Por algo escribió: "Y si Cristo no ha resucitado, la fe de ustedes es ilusoria y todavía están en sus pecados. En este caso, también están perdidos los que murieron en Cristo. Si la esperanza que tenemos en Cristo fuera sólo para esta vida, seríamos los más desdichados de todos los mortales"(1 Corintios 15:17-19). 

Tan seguros estaban estos hombres de lo que creían, o sea, de que Jesús había resucitado físicamente de la muerte, que estaban dispuestos a morir antes que negar esa verdad salvadora. ¡Bendito sea Dios! 

El mundo se esfuerza por negar, sin éxito, la resurrección. Por nuestra parte, nosotros  mantenernos firmes en la verdad de Dios que dice que sólo en el Cristo crucificado y resucitado encontramos salvación. 

ORACIÓN: Señor Jesús, envía tu Espíritu Santo a las almas que aún están en la oscuridad para que también conozcan tu luz. Ayuda a la humanidad a ver la victoria que nos trajiste al resucitar de la muerte. En tu nombre. Amén. 

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